El primer paso para prevenir y combatir los puntos negros es entender bien que son. Los puntos negros son una obstrucción de los poros de la piel que aparece debido a la producción sebácea y a la falta de higiene adecuada. Todas y todos producimos sebo, pero cuando el sebo es excesivo y está en contacto con el medio ambiente este se oxida y obtiene ese tono negro. En otras palabras, tus puntos negros son exceso de sebo que se oxida.
Pero no odies tu sebo, el sebo que producimos de hecho puede ser la mejor arma de tu piel contra el envejecimiento. El sebo es una de las primeras barreras de protección y humectación que tiene nuestra piel, por eso para lucir una piel radiante necesitas siempre tener un nivel adecuado de sebo.
Para evitar que el sebo se convierta en desagradables puntos negros es muy importante mantener un equilibrio entre el sebo y agua que producimos a nivel cutáneo. La única forma de hacerlo es con una rutina de limpieza adecuada a tu tipo de piel. Si no sabes cuál es la rutina de limpieza que necesitas, te recomendamos que agendes un facial a domicilio como una limpieza profunda con nosotros. Durante este servicio, nuestra cosmetóloga Glitzi te hará un diagnóstico de piel y te enseñará cuál es la mejor forma de limpiarla. Para aquellas que ya tienen una rutina de limpieza que les funciona, les recomiendo solo agendar una limpieza facial tipo spa cada dos semanas pues esta les ayudará a mantener en equilibrio al sebo reemplazando la función de las dolorosas banditas, tónicos o mascarillas extremadamente astringentes que pueden causar un efecto adverso en la piel (como deshidratación o piel sensible) si no se utilizan adecuadamente.
Ahora sí chicas, adiós a los puntos negros. Esperamos que esta rápida guía les haya servido y, si tienen alguna pregunta para nuestras cosmetólogas, no duden en dejar sus comentarios aquí abajito.
Enjoy girls,
Loveya!